Viernes, 28 Septiembre 2012
Nuevas tecnologías son cruciales para lograr una agricultura más sostenible y resiliente al cambio climático
Santiago de Chile, viernes 28 de septiembre de 2012 - Las nuevas tecnologías jugarán un rol cada vez más importante en la transición hacia sistemas agrícolas y agroalimentarios más sostenibles y resilientes al cambio climático, concluyeron funcionarios y especialistas de la región que participaron en un seminario de dos días que finalizó hoy en Santiago, Chile.
En el seminario se presentaron ejemplos de avances en el campo de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC), como la generación de sistemas de ordenamiento agroclimático que apoyan la operación de sistemas de seguros agrícolas. También se expusieron avances en el campo de la biotecnología, con el desarrollo de variedades mejor adaptadas a la variabilidad climática, y de la nanotecnología, con aplicaciones más precisas de fertilizantes y pesticidas.
Mario Cimoli, Director de la División de Desarrollo Productivo y Empresarial de la CEPAL, destacó que, "estamos hablando de cambios estructurales en los cuales las nuevas tecnologías están llamadas a cumplir un papel central, pues estas contribuyen no solo al objetivo de producir más alimentos con menos insumos, sino también a una mejor gestión ambiental en la agricultura, así como a la mitigación y adaptación al cambio climático en el sector".
De igual modo, en el evento se destacó la llamada agricultura de precisión, área en la que convergen algunas de las tecnologías mencionadas, especialmente la nanotecnología y las TIC, para generar sistemas más eficientes de monitoreo de plagas y enfermedades, de aplicación de insumos, fertilizantes y plaguicidas, y de riego.
"La relación entre agricultura y cambio climático, resulta central en el combate al hambre, tanto por la amenaza que el cambio climático representa para la seguridad alimentaria, como por el importante rol que juega la agricultura en la mitigación y adaptación al cambio climático", dijo Raúl Benítez, Representante Regional de la FAO para América Latina y el Caribe.
Actualmente la CEPAL y la FAO están desarrollando conjuntamente un estudio sobre la producción científica en materia de agricultura y cambio climático en América Latina, con el objetivo de disponer de mejor información para apoyar a los países de la región en sus procesos de formulación de políticas y de definición de prioridades de investigación.
El estudio busca identificar a los países líderes en materia de investigación científica sobre agricultura y cambio climático en la región, las áreas de trabajo priorizadas en cada país y los vacíos, las posibilidades de mayor cooperación entre los países y los incentivos que se requieren para promover esta cooperación, entre otros aspectos.
III Seminario Internacional Agricultura y Cambio Climático
El Tercer Seminario regional sobre Agricultura y Cambio climático: nuevas tecnologías en la mitigación y adaptación de la agricultura al cambio climático, fue organizado por la Unidad de Desarrollo Agrícola de la CEPAL, el proyecto CEPAL @LIS2 -cofinanciado por la Comisión Europea- y la Oficina Regional para América Latina y el Caribe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El evento contó con el apoyo de la Cooperación Francesa, del Gobierno de Brasil y del Programa Cooperativo para el Desarrollo Tecnológico Agroalimentario y Agroindustrial del Cono Sur (PROCISUR) y tuvo como propósito fomentar el diálogo sobre políticas relacionadas con las nuevas tecnologías en la agricultura y potenciar la cooperación regional en este ámbito.
Participaron altos funcionarios de ministerios y secretarías de Agricultura de la región, de instituciones de investigación e innovación agrícola y de organismos regionales del sector agropecuario, así como encargados de los temas TIC y cambio climático a nivel nacional.
Los desafíos relacionados con el calentamiento global demandan cambios en la forma en que se ha llevado a cabo la agricultura durante las últimas décadas, plantearon los especialistas.
Esto implica pasar de una agricultura intensiva en el uso de energía a una baja en carbono y desarrollar una agricultura más inteligente, no sólo frente a los cambios en el sistema climático, sino también frente a las nuevas tendencias en los valores y preferencias de los consumidores, indicaron.