Un inventario diagnóstico de las tecnologías utilizadas en las plantas municipales de América Latina (AL) y el Caribe reveló que en la región, incluyendo México, sólo el 20 por ciento del agua residual es tratada, en particular de metano disuelto en los efluentes, lo que puede derivar en la propagación de enfermedades infecciosas, informó Adalberto Noyola Robles, director del Instituto de Ingeniería de la UNAM.